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Es tiempo de velar

Pedro Héctor Rodríguez

 

En el ocaso triste de un mundo envejecido,
de un mundo lleno de odios, miserias y maldad,
un canto de sirenas resuena en los oídos
Profetas engañosos predicen amistad,
enarbolando el lema: “ Seguridad y paz”

Mas la aparente calma presagia el vendaval
Seguridad y paz es una vil mentira
Es una artera trampa del príncipe del mal
Están al desatarse los vientos de la ira
Ya se nos echa encima la gran prueba final

¿Estás para esa prueba preparando tu vida?
¿O duermes al arrullo del lema engañador,
pensando que el Señor se tarda en su venida?
Hermano, ¿Por qué duermes un sueño tan traidor?
Despiértate que pronto regresará el Señor

El fin es inminente, mas viene sigiloso
Con rapidez felina, se dispone a saltar
Los días que nos quedan son dones tan preciosos,
que ni un solo minuto se puede malgastar
Despiértate, mi hermano, es tiempo de velar

Velar sobre el carácter, para limpiarnos ya
de toda la inmundicia que ensucia el corazón,
teniendo como meta la plena santidad,
y escalando alturas hacia la perfección,
transitar por la senda sin mirar hacia atrás

¿Y mirar hacia el lado?  ¿Juzgar a nuestro hermano?...
¡No! Dejad ese pecado, es Dios quien juzgará
Y en la balanza eterna tú y yo somos pesados
No mires a tu hermano, no le critiques más
Examínate tú para ver cómo estás

Compárate con Cristo, y así comprenderás
que quedan en tu viña malezas que arrancar
Desnudo, pobre y ciego, cual eres, te verás,
si empiezas ahora mismo tu vida a examinar
Despiértate, mi hermano, es tiempo de velar

Mas no te desanimes, mirando a tu pobreza
Hay tesoros en Cristo, para poder triunfar
No mires hacia abajo, levanta tu cabeza
A Cristo y sólo a Cristo es hora de mirar
Despiértate, mi hermano, es tiempo de velar

Es el tiempo de orar, pidiendo santidad,
de proclamar que Cristo va pronto a regresar,
de cavar en la Biblia, buscando la verdad
Es tiempo de humillarnos, es tiempo de ayunar
Despiértate, mi hermano, es tiempo de velar

 

Este poema forma parte de mis libros "No desmayes, peregrino" y "Ven a buscarnos, Señor" y , los cuales pueden ser adquiridos en amazon.com  

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