¿Para qué sirven mis dones

Pedro Héctor Rodríguez

Con los dones más preciosos, quería ser adornado
Quería saber cantar, ser por todos admirado

Anhelaba declamar las más bellas poesías,
y que todos me halagaran por el don que poseía

Pero vi a la humanidad, que sufriente y dolorida,
no sabía que por ella, Jesucristo dio su vida

Y ya no quise tener halagos ni admiración,
pues el amor de Jesús inundó mi corazón

Y los cantos y poemas, y otros dones que él me ha dado
los puse a sus pies sangrantes, heridos por mi pecado

El tomó mi humilde ofrenda, la miró con regocijo,
y con tierna compasión, mis pobres dones bendijo

Luego, con voz paternal, me dijo: - “toma tus dones,
y úsalos para alegrar a los tristes corazones

“Para darles la esperanza de que mi sangre vertida
los limpia de su pecado, y les da una nueva vida”

Tráele tú también tus dones; él te los bendecirá
Y al emplearlos por Cristo, su dulce paz gozarás

Este poema forma parte de mi libro "No desmayes, Peregrino", el cual puede ser adquirido en amazon.com  

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